domingo, 25 de julio de 2010

Conoce las profecías sobre el fin del mundo

Los Mayas, Nostradamus y el oráculo chino I-Ching pronostican transformaciones en la Tierra en el 2012. Incluso un programa de computadora hace sus vaticinios

Por Mario Enrique Sánchez
De10.com.mx - 2009-06-15
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Especial:(Nostradamus predijo que un meteorito podría impactar con la Tierra)

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¿Crees que el mundo llegará a su fin en un lapso de tres años? Existen diversas profecías que pronostican acontecimientos y transformaciones en el mundo para el año 2012. El sitio de Internet Craked.com reunió algunos de estos augurios.

Los Mayas. De acuerdo a lo escrito por estos antiguos habitantes del continente americano, el supuesto "fin del mundo" no sucederá el 23 de diciembre del 2012, sino el el 21 de diciembre, el día del solsticio de invierno. Aún cuando no se habla de calamidades, los Mayas describen a este fecha como el momento exacto en el que ocurrirá una transformación en la vida de todos los seres humanos. El nuevo ciclo estará lleno de armonía y será libre de materialismos.

I-Ching. Este instrumento era utilizado en China, a mediados del 1200 a.C. , como oráculo. Fundamentado en la interpretación de triagramas, Terance Mc Kenna logró descifrar todos los resultados posibles de este instrumento. Los mensajes fueron expuestos a modo de cronología, y se pudo leer que el fin del mundo ocurrirá el 21 de diciembre el año 2012, a consecuencia de diferentes tipos de calamidades.

Algunas de los acontecimientos adivinados por el I-Ching, fue la caída del Imperio Romano, el descubrimiento del Nuevo Mundo y las dos Guerras Mundiales.

Web-Bot. Un programa de computadora creado en los años noventas fue capaz de realizar diferentes tipos de profecías.

El software funciona como motor de búsqueda en Internet, recopilando todo tipo de información referente a un tema. Analiza las probabilidades de que ocurra algún evento. Una de estas profecías ocurrió en Junio del 2001 cuando Web-Bot sugirió que algo importante sucedería dentro de 60 o 90 días, a más tardar. Tiempo después sucedieron los atentados terroristas en Estados Unidos en septiembre del mismo año.

Otros presagios: Apagón de Nueva York en 2003, Explosión del Transbordador Columbia y catástrofe del Huracán Katrina. De acuerdo a este programa a partir del 2009 ocurrirán pequeñas guerras nucleares que llevarán al mundo a su fin en el 2012.

Los Hopis. Esta comunidad indígena de Estados Unidos se ubica al norte del estado de Arizona. De acuerdo a sus escritos, los seres humanos vivimos, actualmente, en el cuarto mundo, el cual terminará su era en el 2012 para dar paso al quinto. Algunas de sus predicciones fueron: La llegada del hombre "blanco" a Estados Unidos, la aparición del ferrocarril, existencia del teléfono e Internet, y la caída de Skylab.

Nostradamus. Posiblemente el escritor de profecías más conocido. El imperio de Napoleón, el ascenso de Hitler, la bomba atómica y el asesinato de Kennedy fueron algunos de los hechos que pronosticó y se cumplieron.

En el año 2012, de acuerdo al libro perdido, la Tierra se alineará a otros planetas y comenzarán a verse una serie de eclipses en varias partes del mundo. Para ser exacto se apreciarán tres solares y uno lunar, (aunque Craked.com, añade que estos ya han sucedido y no pasó absolutamente nada).

Otras de las predicciones hablan del impacto de un meteorito, una guerra nuclear, el contacto humano extraterrestre y un supuesto cambio climático.

Si son ciertas las Profecías de San Malaquías, el fin del mundo llegará dentro de tres Papas


Quizá no todo el mundo sabe que Pablo VI tiene un mote latino, que es el siguiente: <> (Flor de las flores), y que, a diferencia del nombre que lleva como cabeza de la Iglesia, no fue elegido por él, sino que le estaba designado de antemano. En cambio, ¿qué creyente ignora que Pío XII fue apodado <>, y Juan XXIII, <>, o sea, pastor y navegante?. Desde hace aproximadamente nueve siglos, desde que un monje irlandés que vivió en la primera mitad del siglo XII, y a quien la Iglesia conocería como San Malaquías, tuvo la idea o la inspiración, la compulsión mística, de escribir una extraña y muy precisa profecía: la de los sucesivos papas que gobernarían la Iglesia desde su época hasta el fin de los tiempos. A cada papa, un apodo, un emblema latino, que de algún modo anunciara su reinado, ya fuera en base a su nombre, o a su país de origen, o a su heráldica, o a las características que tendría su reinado. Por ejemplo, el <> de Pablo VI se explica por las flores de lis de su escudo familiar; el <>, de Juan XXIII, por haber sido el Pontífice Pastor por excelencia y haber sido «navegante» muchos años de su vida, en que fue Patriarca de Venecia, y la góndola era su cotidiano medio de llegar a los fieles. Aunque aquellos para quienes no es simpática la figura de Pío XII se resistirán a reconocerlo como <>, tendrán, sin embargo, que admitir que esa imagen, verdadera o no, de su personalidad fue sumamente difundida durante su papado.El tema de las profecías de San Malaquías preocupa hoy a muchos por una sencilla y dramática razón: el elenco de papas o de motes tiene un límite, está cerrado por el último Papa, por el Papa durante cuyo reinado sorprenderá a la Humanidad el Juicio Final, y entre el Papa actual y ese Papa del fin del mundo ya sólo quedaría tres en la fatídica lista del santo irlandés. Después de <> vienen <>, - sí, la luna marcará el carácter del próximo papado -, <>, y <>, y tras esos tres. sencillamente <>, el último.

El gran problema con la funesta profecía de San Malaquías es que está llena de sorprendentes aciertos, desde Lucio II, el primer Papa elegido después de las profecías, hasta Pablo VI. Lucio II fue apodado "Inimicus expulsus". No expulsó a los enemigos de la Iglesia, pero su apellido, casualmente, era Caccianemici (Expulsaenemigos). Eugenio III y Anastasio IV, todavía a mitades del siglo XIII, fueron anunciados como <> y <>; el primero era oriundo de Montemagno; el segundo se apellidaba Suburri y era un simple abate cuando le sorprendió la elección papal. En el siglo XIII, un canónigo de Santa María llegó a Papa con el nombre de Honorio III; San Malaquías lo había podado cien años antes <>, y el águila que vence con sus garras al dragón en el escudo familiar de Clemente IV había sido <> el mote de <>. El tercer Papa de Avignon, en el siglo XIV, debía corresponder a la descripción de <> (el abate frígido). No lo fue de temperamento, ciertamente, pero Benedetto XII había sido abate del monasterio de Fontanafredda (Fuentefría). Realmente, es para pensar que el irlandés era un profeta de primera fila.
Hay otras opiniones, sin embargo.Malaquías vivió entre 1094 y 1148, pero sus profecías sólo aparecen publicadas en 1505, y hay quienes sostienen que el responsable de la publicación, un monje benedictino llamado Arnoldo Wion, que las editó bajo el título de <>, las falsificó desaprensivamente.

Otros historiadores llevan más allá su escepticismo. Para ellos, la redacción definitiva de las previsiones de San Malaquías no se efectúa hasta fines del siglo XVI y con el propósito de influir concretamente en el cónclave de 1590 para favorecer la elección del cardenal Simoncelli.

Sin embargo, claman los defensores de la autenticidad del <>, no fue elegido Simoncelli, sino el cardenal Sfordrati, que gobernó la Iglesia como Gregorio XIV, y el mote que le tocó en suerte se le adecuó debidamente. Era oriundo de la antigua ciudad de Cremona y San Malaquías había dicho – o habría dicho – <>.Si el <> es un libro apócrifo hay que admitir que sus aciertos para con los papas del siglo XX son sorprendentes.

Antes del <> del traslúcido, casi incorpóreo Pío XII, del <> del maravilloso pastor que fue Juan XXIII, no sólo navegante por los canales de Venecia, sino también por los mares procelosos de la más grande renovación de la Iglesia, y del <> de las orgullosas flores de lis del escudo de Pablo VI, Benedetto XV, Papa durante la Primera Guerra Mundial, fue anunciado como <> ("Religión despoblada"), y Pío XI, que supo enfrentarse al nazismo, condenándolo en una encíclica memorable y terminante, como <> ("Fe intrépida").

FALTAN LOS PAPAS "DE LA LUNA", "EL DEL TRABAJO" Y "EL DEL GLORIOSO OLIVO"

Pero, por supuesto, no conviene entusiasmarse demasiado con los aciertos de San Malaquías. Si realmente no hubo falsificación, si estos aciertos continúan hasta el fin, el fin está cerca. La muerte de Pablo VI, tres papas más – el de la luna, el del trabajo, el del glorioso olivo -, y ya tendremos el segundo Pedro, el Pedro apocalíptico, <>, la destrucción de Roma y el advenimiento del Juez tremendo. Amén. Un amén que equivale a un adiós definitivo a este mundo, santos y profetas y papas incluidos.